El regulador de edificios Gira KNX garantiza automáticamente una temperatura ambiente constante en todo momento. Para ello, el regulador integrado registra la temperatura ambiente actual con un sensor de temperatura interno y externo y la adapta a las especificaciones teóricas de los habitantes. El dispositivo no cuenta con ningún elemento de mando o de indicación y se utiliza en caso de que la temperatura no deba controlarse in situ, sino de manera centralizada. El manejo tiene lugar exclusivamente a través del bus.
De este modo se puede ajustar la temperatura de forma centralizada, p. ej. en edificios de oficinas con varias salas. En este caso, el regulador de objetos se encarga del mantenimiento constante de los ajustes de temperatura deseados. Gracias a cinco modos operativos diferentes –confort, stand by, noche, protección contra helada/calor y bloqueo del regulador (p. ej. modo punto de rocío) con valores de consigna de temperatura propios en el modo de calentamiento o de refrigeración– los usuarios disfrutan de una alta comodidad de manejo.